La Seducción reflejada en pocas palabras
Lo dicho, sugerido, insinuado e imaginado.
Imagen : tango-tango (pinturasbachetta.blogspot.com)
En el ascensor
de Orlando van Bredam
Mientras bajan, el imagina lo que haría con ella si ella quisiera. Ella se imagina lo que él imagina y lo mira. Él ve en los ojos de ella lo que ha imaginado y se llena de vergüenza.. Ella se lamenta, otra vez, de la eterna indecisión de ambos.
Persistencia
de Ana María Shúa
Lo soñé de espaldas y de costado, me soñó encorvada, enmascarada. Lo soñé distinto, me soñó escondida. En el último sueño quedamos en encontrarnos, despiertos, en un bar de la calle Anchorena. Fue difícil reconocernos, hacía frío, nos aburrimos, no nos gustamos y de común acuerdo decidimos no volver a encontrarnos. Y sin embargo, ya vés.
Despertares
de Sergio Rodriguez Chirillo
Mientras se desnudaba ante él, la envolvió una timidez olvidada. Hubiera preferido un velo entre ambos que difuminara el paso de los años pero, decidida a soltar tanto deseo domesticado, se entregó al juego.
Sentada, acarició despacio sus pantorrillas, después se demoró en los muslos hasta que, ya de pie, se volteó de espaldas y luego de lado, se arqueó levemente y logró la perfecta sinuosidad de antaño. Se soltó el pelo, cubrió sus pechos haciendo una mueca pero luego los ofreció complacida.
Entre sonrisas y humedades le dio una última mirada al espejo antes de marcharse pensando lo bien que hacía un poco de vanidad cada tanto.
Mujer que se recoge el pelo
de Teresa Serván
Mujer que se recoge el pelo para enseñar el lunar que adorna la parte alta de su espalda. Alfiler herrumbroso, clavado justo donde comienza el cuello. Vórtice que arranca la mirada de los hombres.
Hombres que se acercan a la pequeña cerradura y quedan atrapados, para siempre, entre los rizos de esa mujer que suelta su pelo para cubrir el lunar que adorna la parte alta de su espalda.